饾悑饾悶饾悳饾惌饾惍饾惈饾悮: 芦La ense帽anza de tus palabras ilumina; y hasta la gente sencilla las entienden禄 (Salmo 119:130)
La oscuridad nos trae miedo. No estamos seguros de movernos ni siquiera en espacios familiares. Para no caernos ni derribar nada, caminamos despacio y andamos a tientas en la oscuridad. Deseamos que la luz regrese pronto o que llegue el amanecer, porque la luz nos devuelve la seguridad y la paz.
Si la oscuridad f铆sica ya nos perturba, la oscuridad espiritual deber铆a molestarnos a煤n m谩s. Vivir como si Dios no existiera, luchar para tener nuestra propia luz y hacer todo lo posible para ganarnos un lugar bajo el sol, sin preguntarle a Dios, son signos de que estamos sumergidos en la oscuridad de la incredulidad y la arrogancia. Y si esta es nuestra condici贸n, el miedo al fracaso nos asfixia y este puede ser el origen de nuestras noches de insomnio y nuestros d铆as malos.
Para acabar con la angustia generada por la falta de luz f铆sica, basta con que se encienda una l谩mpara o que brille el sol. Pero, 驴C贸mo hacer brillar una luz sobre un coraz贸n sumergido en la oscuridad y la ansiedad?
El salmista responde: 芦La ense帽anza de tus palabras ilumina; y hasta la gente sencilla las entienden禄 (Salmo 119:130). La Palabra de Dios disipa las tinieblas y hace resplandecer la luz en el coraz贸n de los que la escuchan humildemente. Esto se debe a que el centro de la Biblia es Jes煤s, el que una vez se present贸 as铆: 芦Yo soy la luz del mundo; el que me sigue no andar谩 en tinieblas, sino que tendr谩 la luz de la vida禄 (Juan 8:12).
La luz de Jes煤s trae paz y sabidur铆a que dura para siempre. Fue para iluminar nuestras vidas que Jes煤s vino al mundo. En la cruz, la vida de Jes煤s se extingui贸 por un momento, pero pronto volvi贸 a brillar cuando resucit贸.
Los corazones humildes nunca se quedan en la oscuridad cuando Jes煤s mora en ellos. Jes煤s los ilumina con su Palabra y les da paz y coraje para vivir y brillar cada d铆a, venciendo las tinieblas con la luz de Dios.
饾悗饾惈饾悶饾惁饾惃饾惉: Querido Dios, que tu Palabra ilumine siempre mi coraz贸n y me gu铆e a la vida eterna. En el nombre de Jes煤s. Am茅n.
Autor: Paulo Roberto Teixeira